Reseña

Antígona estuvo siempre condenada al infortunio. Su padre causó desgracias a su familia. Sus dos hermanos murieron el uno a manos del otro. Y ella se propone enterrar al deshonrado incumpliendo la ley, así que la mandan enterrar viva para castigarla. Pero cuando, contenta, acepta el castigo pensando que entrará en la tierra de los muertos a encontrarse con su familia, se da cuenta de que está en una tumba. No está ni aquí ni allá. Confundida, sin saber ya siquiera quién es, varios personajes llegarán a visitarla para confirmarle que, como bien lo dice la tragedia griega, no puede decirse que uno es feliz sino hasta el último minuto de la vida.